"Llamar al pan y que aparezca sobre el mantel el pan de cada día;
darle al sudor lo suyo y darle al sueño
y al breve paraíso y al infierno y al cuerpo y al minuto lo que piden;
reír como el mar ríe, el viento ríe, sin que la risa suene a vidrios rotos;
beber y en la embriaguez asir la vida,
bailar el baile sin perder el paso, tocar la mano de un desconocido
en un día de piedra y agonía ..."
(Fragmento de !La vida sencilla, Octavio Paz.)