"... En lugares dispersos lo blanco se teñía de rosa,
a veces tan intensamente que se tornaba gris en los bordes.
No sé por qué el rosa grisáceo posee una belleza tan acariciadora y posesiva, ya no mineral, sino triste y cansada como las personas No sé si tendrá color la nostalgia"
("Todo lo que tengo lo llevo conmigo", Herta Mülller.)