Fluctuación en el espacio


Un hombre yace en el cementerio de Montmartre. Su nombre es León. De profesión físico, nacido en Francia, demostró, de manera experimental, la rotación terrestre mediante un enorme péndulo.
Para  certificar su teoría, el científico hizo colocar una bala de cañón de 26 kilos colgada de la bóveda del Panteón de París, mediante un cable de 67 metros de largo.
El artefacto tardaba dieciséis segundos para ir y volver de un punta a otra. En la parte inferior de la bala fue colocado pequeño estilete. En cada oscilación, el estilete dejaba una marca diferente en el suelo del Panteón, cubierto de arena. Las huellas entre sí quedaban separadas unos dos milímetros a la izquierda de la anterior.  Quedó de manifiesto que la Tierra giraba. En adelante, aquel cuerpo suspendido en continuo  vaivén que hizo posible exponer este movimiento fue conocido como el «péndulo de Foucault».